EL SILEDIN

FILA BRASILEIRO ---- Standard nº 225 FCI ----

APARIENCIA GENERAL.- Raza típicamente molosoide. Osamenta poderosa, estructura rectangular, compacta, al tiempo que armónica y proporcional. Añadida a su masividad, muestra una gran agilidad fácilmente perceptible. Las hembras deben mostrar una bien definida feminidad, la cual las diferencia inmediatamente de los machos.
COMENTARIOS.- Las razas de tipo moloso se caracterizan por la importancia de su anchura craneal. En el Fila el eje transversal del cráneo será aproximadamente igual a su longitud. Evidentemente una cabeza de tales características deberá corresponder a un cuerpo armónico con ella, esto es, robusto, masivo, notablemente poderoso, transmitiéndonos la sensación de fuerza contenida y pronta a ser desencadenada. Junto a ésta masa, el Fila debe poseer una gran agilidad revelada por un movimiento libre, ligero, rítmico.
DEFECTOS.- Cráneo u hocico estrechos. Tipo general ligero, longilíneo; osamenta débil; poca masa corporal; movimientos pesados, sin elasticidad. Sensación de apatía.

CARÁCTER Y TEMPERAMENTO.- Dotado de coraje, determinación y valentía notables, es dócil con su propietario y familia, al tiempo que extremadamente tolerante con los niños. Su fidelidad se ha convertido en un dicho brasileño. Siempre busca la compañía de su dueño. Una de sus características es la ojeriza hacia los extraños. Muestra una actitud calmada, autoconfianza y seguridad en sí mismo, no perturbada por ruidos extraños o cuando se enfrenta a un nuevo entorno. Inmejorable guardián de propiedades, se entrega por instinto natural a la persecución de caza mayor y a la conducción de ganado.
COMENTARIOS.- Desde el momento de su entrada en la pista, el Fila demuestra coraje y determinación. Su expresión es intrépida y su mirada severa. Su ataque, a quien se atreva a aproximársele, denotará su ojeriza a los extraños y su instinto de guarda. Si en éste caso es reprendido por el dueño, tratará de agradarle con halagos, mostrándose obediente. Al ser testado su temperamento, atacará en diagonal ascendente, la correa tirante, sin precisar incentivos del presentador. Es importante señalar que el Fila nunca debe ser un animal descontrolado, al que resulte imposible observar. El propietario debe tener siempre dominio sobre su perro. Pero también es fundamental saber que para juzgar a un Fila no es necesario tocarlo. Al igual que el temperamento, el sistema nervioso será examinado desde la entrada del perro en la pista. Los Filas con buen sistema nervioso no temen el tumulto de una exposición, sino que muestran expresión de seguridad, atención, mirada escrutadora.
DEFECTOS.- Animales amedrentados. Agresividad hacia el dueño por nerviosismo. Descontrol y temor ante los ruidos. No debe considerarse como defecto la desconfianza y nerviosismo del perro si el juez intenta tocarle.

MOVIMIENTO.- El Fila debe desarrollar pasos largos y elásticos. Su paso suave recuerda a los movimientos de los grandes felinos. Su característica principal es la ambladura: un paso lateral de dos ritmos en el cual las piernas de cada lado avanzan y retroceden por parejas, desarrollando un movimiento de balanceo del cuerpo del perro (llamado paso de camello) acentuado a lo largo de la línea superior hasta la cola. Al andar porta la cola por debajo de la línea dorsal. Muestra un trote suave, libre y sin esfuerzo, con zancadas poderosas. Su galope es poderoso, de una velocidad insospechada para un perro tan grande y pesado. Debido a sus articulaciones sueltas, típicas de los molosoides, el movimiento del Fila da la impresión, y de hecho es así, de ser capaz de dar cambios de dirección inmediatos y muy rápidos.
COMENTARIOS.- Las articulaciones del Fila son elásticas, lo que le proporciona un movimiento aparentemente descoyuntado, acentuándose al andar por su ambladura. El balanceo de las costillas y de la grupa le da al paso su marcada tipicidad. Este balanceo lateral es ayudado por la “bisagra” que determina el punto a partir del cual el movimiento del tren trasero se acentúa independientemente del movimiento del tren delantero. Cuando el perro se aproxima o se aparta del observador, éste balanceo debe darnos la impresión de existir independencia entre los movimientos delantero y trasero. Al mismo tiempo los músculos de los hombros, con la corona de los omóplatos alzándose y descendiendo en la cruz rítmicamente, y el subir y bajar de los metacarpos, en compás transmitiendo a todo el frente y repetido por la cabeza, prestan al Fila un andar auténticamente felino. El trote es un resultante de la estructura ósea. Esqueleto perfecto, trote perfecto; esqueleto defectuoso, trote defectuoso. Para cumplir el requisito del estándar el perro ha de tener una estructura y angulaciones equilibradas. Podríamos calificar de buen rendimiento al trote que recorre gran espacio de terreno con pocos pasos; por consiguiente, pasos largos, suaves, sin demostrar esfuerzo. En el galope, el impulso depende exclusivamente del tren trasero. Su examen, aún con el perro parado nos permitirá preveer como galopará. Iliaco amplio, isquio largo, pierna robusta (región de la tibia) por ser fuerte el tendón de Aquiles, tarsos gruesos, metatarsos potentes, pies con dedos bien arqueados, asegurarán una buena propulsión poderosa, lanzando virtualmente al perro hacia el frente, en galopes largos, auténticos saltos de extensión.
DEFECTOS.- Cabeza y cuello erguidos, portados por encima de la línea dorsal durante el movimiento. Pasos cortos. Trote descompensado y no pendular. Galope corto. Empuje débil, lanzando las piernas hacia atrás y hacia arriba.

EXPRESIÓN.- En reposo es calmada, noble y llena de seguridad en sí mismo. Nunca revela una expresión aburrida o ausente. Cuando está atento su expresión refleja determinación y alarma, con una mirada firme.
DEFECTOS.- Expresión apática.

CABEZA.- La cabeza del Fila es grande, pesada, masiva, siempre proporcional al resto del cuerpo. Vista desde un plano superior presenta una forma trapezoidal en la cual la cabeza se inserta en un formato periforme. Vista de perfil el hocico y el cráneo deberán tener aproximadamente una proporción de 1 a 1, con el hocico ligeramente más corto que el cráneo.
COMENTARIOS.- El estándar hace alusión a una cabeza “grande, pesada”, pero esto no debe entenderse en el sentido de que la cabeza domine toda la figura. Hay un principio básico en el juicio de los animales: “nada debe destacarse”. En otras palabras, todas y cada una de las partes deben armonizar entre sí, de tal modo que ninguna atraiga la atención del observador. Si alguna sobresale, hay un error en ella o en las restantes. Así, si la cabeza destaca exageradamente ella será muy grande para ese perro ó el cuerpo muy escaso para esa cabeza. La locución “grande, pesada” debe, por tanto, ser entendida en el sentido de que la cabeza de un Fila nunca puede parecer pequeña o leve, fundamentalmente en los machos. Es siempre más grave un macho con cabeza femenina que una hembra de cabeza masculina. El hocico debe ser de longitud prácticamente igual al cráneo. Sería interesante que el estándar precisase el porcentaje del hocico en la longitud de la cabeza. Si aplicamos esa regla de que en un juicio “las partes deben ser y parecer ser”, tendremos que en la relación cabeza-hocico, conforme de ancho, longitud y profundidad del cráneo y del hocico, unido al tamaño mayor ó menor de las orejas y a su inserción, el hocico parecerá sin serlo mayor o menor. No es una cuestión de metro. El hocico “debe parecer” de longitud igual al cráneo, sin llegar a serlo nunca si lo midiéramos.
DEFECTOS.- Cabeza pequeña, estrecha o excesivamente grande. Todo lo que se aparte de la armonía general .

CRÁNEO.- El perfil del cráneo muestra una curva muy suave desde el frente hasta el occipital, el cual es protuberante, especialmente en los cachorros. Visto de frente es grande, ancho, con la línea superior ligeramente curvada. Los planos laterales descienden casi en vertical, describiendo una curva que se estrecha cerca del hocico. Nunca se marca el stop.
COMENTARIOS.- El stop es levemente inclinado, propiciando el inicio de la suave curva de la línea superior del cráneo, que termina en el occipital. Examinándolo de frente, el cráneo muestra también una suave curva de oreja a oreja. Sus laterales descienden también en una curva suavísima, casi vertical. La curva de los laterales no debe ser continuación de la del cráneo, lo que le daría a la cabeza forma de pelota. Debe ser perfectamente perceptible donde termina la curva del cráneo donde tiene su inicio la de los laterales, interrumpiéndose por tanto la secuencia del trazo. El occipital es el hueso estructurador de la cara posterior del cráneo en toda su anchura. Como los restantes huesos del cráneo, es doble, uniéndose las partes en el centro de la cara posterior craneal. Esta unión se denomina protuberancia occipital y es popularmente conocida como “cresta occipital”. En el Fila todo el occipital, y no solamente su cresta, debe destacarse en la nuca, formando una perfecta curva.
DEFECTOS.- Cráneo plano o demasiado abombado, uno y otro tanto vistos de frente como de perfil. Cráneo huído (alto en el frente, descendiendo detrás sin que el occipital se presente pronunciado). Laterales del cráneo muy salientes. Huesos del cráneo destacados (Cabeza delgada o huesuda). Cráneos en los que solo destaque la cresta y no todo el occipital. Occipital en V.

STOP - DEPRESIÓN FRONTAL.- Visto de frente es particularmente inexistente. El surco mediano es fino y se desplaza hacia arriba suavemente. Visto de lado el stop es bajo, inclinado y virtualmente formado sólo por los bien desarrollados arcos supraciliares.
COMENTARIOS.- En la mayoría de las razas la depresión nasofrontal está formada por el hueso frontal, al descender bruscamente del cráneo hacia el hocico. En el Fila el “stop” es prácticamente inexistente cuando miramos al perro de frente, limitándose a un suave declive en el paso de la línea superior del hocico hacia la línea superior del cráneo. Visto de perfil el “stop” es aparente, formado por los arcos supraciliares, entre los que discurre el surco mediano, que se extiende hasta el comienzo del cráneo. Es este surco, en el centro de la cabeza, quien obliga a las arcadas supraciliares a sobresalir.
DEFECTOS.- Stop acentuado de frente. Ausencia de stop visto de perfil. Falta del surco mediano.

HOCICO.- Fuerte, ancho y profundo, siempre en armonía con el cráneo. Visto de frente es grueso bajo los ojos, estrechándose levemente hacia la mitad del hocico y de nuevo ensanchándose suavemente hasta la línea frontal. Visto de lado la línea superior es recta o romana, pero nunca hacia arriba. La línea frontal del hocico es conformada por una línea perpendicular, con una depresión justo bajo la nariz, y formando una curva perfecta con los labios superiores, los cuales son gruesos, colgantes y sobreponiéndose a los inferiores, dando forma a la línea inferior del hocico que es caso paralela a la línea superior. La comisura labial es siempre aparente. Los labios inferiores están firmemente unidos al maxilar hasta los caninos, desprendiéndose desde allí hacia atrás, presentando los bordes dentados. El hocico tiene una gran profundidad en su raíz pero sin sobrepasar su longitud. Rima labial en forma de "U" invertida.
COMENTARIOS.- Es importante recalcar que la línea inferior del hocico debe ser paralela a la superior y que el paso entre ambas es una curva perfecta. El hocico debe ser más largo que profundo. De aquí su forma rectangular, un rectángulo horizontal. La línea superior es recta desde su raíz hasta el final del hueso nasal, cuando se une al cartílago de la nariz. En esa unión hueso-cartílago es frecuente que la línea sufra un leve descenso , esto recibe el nombre de nariz romana. La línea anterior desciende en una recta casi vertical hasta llegar cerca de la mandíbula, donde describe una curva perfecta que le une a la línea inferior; esta línea es casi paralela a la superior, hasta la comisura labial que es siempre aparente. El perfil del hocico queda así virtualmente dibujado por los labios superiores, pues es a éstos a quien corresponde diseñar las líneas superior, anterior e inferior (también ésta), pues descienden por debajo de la mandíbula, lo que no significa que puedan sobrepasarla en mucho espacio, pues caeríamos en el defecto constituido por “labios colgantes”. Hay que prestar también atención a que el hocico tenga una buena anchura, para poder proporcionar la potencia de mordida que corresponde a un perro de presa. Surco o rima labial en forma de “U” invertida, bien abierta, este punto constituye un detalle típico del fila de suma importancia y debe exigirse siempre.
DEFECTOS.- Línea superior ascendente o en arco (convexa de la raíz a la trufa). Línea anterior inclinada (enognatismo). Hocicos que vistos de perfil muestran una profundidad igual o superior a su longitud. Hocico corto, aproximadamente la mitad de la longitud del cráneo (1 para 2). Ausencia de línea inferior, es decir, que la línea anterior nace en curva desde la trufa hasta la comisura labial, eliminando totalmente la línea inferior del hocico. Comisuras labiales sin bordes dentados o tan caídas que no contengan la salivación. Las rimas labiales en forma de V invertida son un gravísimo defecto de tipicidad que debe ser penalizado con la descalificación y a las que se debe prestar mucha atención; su origen está en influencia de sangres extrañas (mastino napolitano o bloodhound) y no, como se ha dicho en algunas ocasiones, en hocicos demasiado estrechos.

NARIZ.- Ventanas nasales anchas y bien desarrolladas, sin ocupar enteramente la anchura del maxilar. Trufa de color negro.
COMENTARIOS.- Visto de frente debe haber hocico a cada lado de la trufa. Las aberturas nasales deben ser amplias. La trufa vista de frente debe tener sus dos ejes (vertical y horizontal), esto es, anchura y altura, perfectamente equilibrados aunque siempre con una levísima preponderancia de la anchura. Si la altura es poca y la anchura excesiva se produce una nariz tipo “negroide”, con ventanas muy abiertas. Cuando la trufa ocupa casi todo el frente del hocico, ocurre que la causa es que éste es demasiado estrecho. El color de la trufa ha de ser siempre negro, sin excepciones.
DEFECTOS.- Trufa muy grande, ocupando todo el frente del hocico. Aberturas nasales pequeñas. Trufa color marrón.

OJOS.- De tamaño medio a grande, forma almendrada, bien separados entre sí, de inserción media a profunda. Colores admitidos: desde el marrón oscuro al amarillo, siempre en concordancia con el color del manto. Debido a la profusión de piel suelta muchos individuos presentan párpados caídos, lo cual no se considera una falta dado que acentúa la expresión melancólica, típica de la raza.
COMENTARIOS.- Los ojos del Fila tienen una expresión triste y lánguida cuando el animal está en reposo, produciéndose un gran cambio de expresión cuando está atento, donde la mirada es mucho más enérgica y severa. La forma de los ojos está muy influenciada por la piel gruesa y suelta, así como por el gran desarrollo de las arcadas supraciliares, que protegiéndolos, los hace parecer un poco hundidos, acentuando también la curvatura del párpado inferior por efecto del peso de la piel. En los casos más acentuados se llega al ectropión, que aunque el estándar no lo relaciona como defecto, debe evitarse en la crianza por los perjuicios oculares que ocasiona. Los ojos son ligeramente ovalados, nunca redondos ni tampoco rasgados. De inserción alta deben parecer separados y nunca juntos. Deben evitarse los ojos amarillos en ejemplares atigrados, aun cuando el color del fondo del manto sea claro, pues la tonalidad general del perro requeriría ojos marrones oscuros. En los ejemplares de color ceniza, los ojos siempre presentan una tonalidad bastante clara, típicos de esta coloración, que deben considerarse siempre como correctos. Este tipo de ojos claros se dan igualmente en los ejemplares atigrados con el fondo del manto color ceniza y son correctos en ellos. Los cachorros presentan con frecuencia los ojos de color azulado, cambiando más adelante a su color definitivo.
DEFECTOS.- Ojos saltones. Ojos redondos o rasgados. Ojos muy juntos o muy separados. Ojos semi-cerrados. Ojos azulados.

OREJAS.- Caídas, grandes, gruesas y en forma de "V". Anchas en la base y rematadas en punta en su extremo. Extremos redondeados. Insertadas en la parte posterior del cráneo, en línea con los ojos cuando está en reposo. Cuando levanta las orejas lo hace por encima de su posición original. La raíz es oblicua con el borde anterior más alto que el posterior. Caen hacia las mejillas o se pliegan hacia atrás permitiendo ver su interior.
COMENTARIOS.- Siendo el cráneo, visto de frente, levemente abombado, y teniendo el Fila la piel gruesa y desprendida, es natural que las orejas, al ser grandes, por el efecto de su propio peso tengan una inserción baja, es decir, por debajo de la línea de los ojos. La línea media de los ojos que menciona el estándar es la que trazaríamos uniendo la trufa con el ángulo externo del ojo y prolongándola hasta el occipital. Además de baja la inserción será lo más posterior posible, virtualmente al lado del occipital. La raíz de la oreja es ancha e inclinada, estando más alto en canto del borde anterior de la concha. La altura de las orejas es variable, cuando el perro permanece en atención, gira la cara exterior de las orejas hacia el frente y contrayendo la piel del cráneo, eleva las orejas. Por el contrario en reposo, comúnmente, las girará en dirección inversa, volteando hacia el frente su cara interna. Esta gran movilidad de las orejas, bajas en reposo, altas en atención exige especial cuidado del observador para no creerlas de mala inserción.
DEFECTOS.- Inserción alta, estando el perro en reposo, orejas finas, pequeñas, de raíz horizontal o de raíz próxima a los ojos. Debe considerarse un defecto grave la extremidad de la oreja en punta en vez de redondeada.

DIENTES.- Más anchos que largos, fuertes y blancos. Los incisivos superiores son anchos en su raíz y afilados en sus extremos. Los caninos o colmillos son poderosos, bien insertados y bien apartados entre sí. La mordida ideal es en tijera aunque se acepta una mordida en pinza.
COMENTARIOS.- Los dientes son relativamente pequeños para lo que cabría esperar en un perro de este tipo, sin embargo son anchos y fuertes. En hocicos de buena longitud, esto es, de tamaño igual al cráneo (tal y como pide el estándar) no es frecuente encontrar defectos de mordida. En el primer estándar de la raza, redactado en 1946 por los Drs. Paulo Santos Cruz, Erwin Waldemar y Joao Ebner, eminentemente descriptivo, se menciona únicamente la mordida en tijera. Durante el I Symposium de Brasilia celebrado en 1976 se propuso que se admitiese el prognatismo y se redujese la longitud del hocico. Tras largas jornadas de discusión se llegó a un acuerdo: “Mordida en tijera o tenaza. Reducción de la longitud del hocico a un 40% del total de la cabeza, o sea, de 1 por 1 y 1/2”. De este modo la cabeza del Fila adquirirá las mismas proporciones que la del Mastiff y el Mastino Napolitano. El nuevo estándar aprobado en 1984 devolvió al hocico su longitud original de 1 por 1, pero permaneció la mordida en tenaza. No obstante debe preferirse la tijera invertida a la tenaza, ya que en esta última se produce un desgaste prematuro de los incisivos, además de impedirles cortar, cosa que si se realiza sin grandes problemas con la tijera invertida.
DEFECTOS.- El enognatismo es falta descalificante. El prognatismo es falta grave. Dientes oscuros.

CUELLO.- Extraordinariamente fuerte y musculoso, dando la impresión de que es corto. Curvado levemente en su cara superior y bien destacado en el cráneo. Pliegues en la garganta.
COMENTARIOS.- El Fila, como todos los perros rastreadores, mantendrá la cabeza siempre baja. Normalmente el cuello es llevado levemente por encima de la línea dorsal, los hay, no obstante, que mantienen el cuello y la cabeza por debajo de la línea del dorso y al paso balancean la cabeza rítmica y verticalmente. El desarrollo muscular del cuello, en el Fila, es impresionante. De él proviene la fuerza necesaria para, una vez hecha la presa, mantener el buey enteramente dominado contra el suelo. Su amplio diámetro denuncia esa potencia y contribuye a que aparezca corto. La línea o borde superior del cuello es ligeramente convexa, principalmente en los machos. En la garganta dos pieles gruesas, colgantes, longitudinales al cuello, paralelas, comienzan junto a la comisura labial y descienden hasta el antepecho, prosiguiendo, en muchos ejemplares, por la línea inferior del tronco. Son un detalle de tipicidad fundamental y debe exigirse que destaquen perfectamente desarrolladas. Es fundamental no confundir estos dos pliegues longitudinales con lo que sería una papada o bolsas de piel transversales, comunes en otras razas pero totalmente penalizables en el Fila.
DEFECTOS.- Cuello llevado alto; cuello fino, largo o con línea superior recta. Falta de barbelas. Pliegues transversales al cuello.

LÍNEA SUPERIOR.- Cruz en línea descendiente, abierta debido a la separación habida entre los omóplatos. La cruz esta situada en un nivel inferior al de la grupa. Detrás de la cruz, la línea superior cambia de dirección ascendiendo suavemente hacia la grupa. Este segundo tramo no debe mostrar tendencia a ensillarse o encarparse.
COMENTARIOS.- En su línea superior el Fila se diferencia de las restantes razas caninas. La línea superior está formada por dos rectas separadas por la “bisagra”, una hasta el final de la espalda y la otra hasta la grupa. Es común, aunque no realmente correcto, considerar el tren posterior del fila más alto que el anterior. En verdad el hueso iliaco tiene la misma altura que la cruz, sólo que la línea entre estas dos partes no es horizontal, sino compuesta por dos rectas inclinadas convergentes.
DEFECTOS.- Dorso horizontal, o sea recto. Dorso ensillado, encarpado. Línea cóncava. Grupa más baja que la cruz.

GRUPA.- Ancha, larga, con un ángulo de aproximadamente 30º respecto a la horizontal, mostrando una leve curva. La grupa se posiciona un poco más alta que la cruz. Vista desde atrás la grupa es amplia, aproximadamente tan ancha como el tórax, permitiéndose ser más ancha en las hembras.
COMENTARIOS.- La grupa de un perro está diseñada por varios músculos que unidos al iliaco dan forma al muslo, por tanto una grupa correcta en su inclinación garantiza una mayor propulsión y contracción en el movimiento con el mínimo esfuerzo, esta inclinación ideal del iliaco, corresponde a los 30º que pide el estándar. Examinado el perro desde arriba la longitud de la grupa debe ser equivalente a la del tórax o por lo menos no discrepar mucho de ella, principalmente en las hembras.
DEFECTOS.- Grupa plana u horizontal. Grupa estrecha, dándole al cuerpo la típica figura periforme. Grupa demasiado inclinada.

TRONCO.- Fuerte, ancho y profundo, cubierto por una piel gruesa y suelta. El tórax es más largo que el abdomen. La longitud del tronco es igual a la altura más un 10%, medida desde el antepecho hasta la punta de la nalga.
COMENTARIOS.- Las tres exigencias del estándar: “fuerte, ancho y profundo”, debemos entenderlas en un conjunto íntimamente relacionado. La “profundidad” consiste en que las costillas desciendan hasta los codos y no por debajo de ellos. La “anchura” resulta de la curvatura del costillar, que debe ser mediana. El costillar muy acentuado o “costilla de barril” es un defecto. Las costillas planas o en quilla también lo son y provocan que todo el conjunto de los hombros se desplace hacia adelante, causando un antepecho y pecho defectuosos y manos abiertas hacia fuera (“mano francesa”). Para que el tórax sea más largo que el abdomen, el esternón debe ser lo más largo posible para dar apoyo a toda la estructura del tronco; si fuese demasiado corto se produciría un riesgo de dorso ensillado, ya que el peso de todo el conjunto del abdomen no tiene otro soporte que la columna vertebral y tiraría de ésta hacia abajo. Es por esto importante, y debe exigirse, un esternón de buena longitud.
DEFECTOS.- Costillas planas o en barril. Esternón corto.

TÓRAX.- Costillas bien arqueadas, aunque sin interferir con la posición de los hombros. Pecho profundo y voluminoso, descendiendo hasta el nivel de los codos. Pectorales bien señalados.
COMENTARIOS.- Las costillas deben salir de las vértebras en ángulo bien acentuado y luego iniciar el descenso en curva muy suave, recogiéndose finalmente en ángulo igual al de la partida. Si las costillas descendiesen en curva muy acentuada (barril) interferirían en el movimiento del hombro, obligando a éste a desplazarse hacia fuera (abierto de codos). Si las costillas descienden verticales, sin curvatura, el tórax será estrecho y el perro tenderá a juntar las piernas hacia el centro y a sacar las manos debido a la falta de apoyo para el húmero y el codo, además de causar problemas por la falta de espacio para los pulmones Es importante observar un detalle que es engañoso a veces, que sean las costillas y no la piel que cae suelta formando pliegues, las que llegan hasta la punta del codo. El esternón ha de ser paralelo al suelo como precisa el estándar para generar una buena cavidad torácica que proporcione espacio al corazón y longitud al diafragma. Del mismo modo, proporciona equilibrio en el esqueleto del perro, evitando que se sobrecargue el tren delantero, cosa que ocurriría en el caso de un esternón demasiado corto.

FLANCO.- Más corto y no tan profundo como el tórax, mostrando claramente la separación de las partes que lo componen. En las hembras la faldilla del flanco está más desarrollada. Vistos desde arriba los flancos son más estrechos que el tórax y la grupa, pero sin marcar la cintura.
COMENTARIOS.- El flanco debe ser ligeramente menos profundo que el tórax, formado por una línea muy suavemente ascendente. Esta ascendencia está determinada por los músculos abdominales, utilizados durante el galope para empujar la grupa por debajo del cuerpo, forzando a la columna vertebral a doblarse.
DEFECTOS.- Vientre caído. Vientre agalgado.

LÍNEA INFERIOR.- Pecho largo y paralelo al suelo en toda su extensión, vientre suavemente ascendente pero nunca agalgado.
COMENTARIOS.- El antepecho correcto es lleno, un poco ovalado, ascendiendo en suave curva, y es de gran utilidad ya que impide que las patas delanteras se crucen durante el trote. La punta del esternón ha de estar bien protuberante y marcada en el antepecho, situada a la misma altura que la punta del hombro y tras estructurar la curva del antepecho, el esternón prosigue hacia atrás, en recta paralela al suelo, diseñando entonces la línea inferior del tórax, hasta su extremo posterior, el xifoide. Desde este punto en adelante está el abdomen. Alterando la línea del abdomen los machos presentan la vaina del pene. En las hembras esa línea prosigue en suave ascendencia, estando parcialmente oculta por la faldilla del flanco, mucho más desarrollada en ellas que en los machos. Por tanto podemos afirmar que la línea inferior está constituida por una línea curva (antepecho) y dos rectas, la primera paralela al suelo (línea inferior del tórax) y la segunda suavemente ascendente (línea del vientre). Nunca puede darse en un perro con buena línea dorsal un paralelismo de la línea inferior al suelo, como a veces se observa que se da como correcta en algunos rapports de jueces (ya que para eso el animal habría de tener el abdomen descendido, lo que se conoce como vientre caído, lo que produciría un perro poco resistente a la fatiga y con movimiento perjudicado, ya que suele producir un encorvamiento de la espalda), sino que este paralelismo se da con la línea dorsal.
DEFECTOS.- Antepecho plano, generalmente formado por el desplazamiento hacia el frente de todo el conjunto de los hombros. Tórax de arenque (esternón en diagonal ascendente a partir de los codos y prolongada la diagonal por la línea del vientre). Esternón corto. Línea inferior baja (prolongando al mismo nivel la línea del tórax). Línea inferior agalgada. Línea inferior caída (en perros muy viejos u obesos).

MIEMBROS ANTERIORES.- La estructura del hombro debe estar compuesta por dos huesos de igual longitud (omóplato y húmero) posicionándose el primero en un ángulo de 45º respecto a la horizontal, y el otro en un ángulo de 90º respecto al primero. La articulación escápulo-humeral forma la punta del hombro la cual se sitúa al nivel de la punta del esternón, un poco a retaguardia de esta. En una posición ideal la punta del hombro debe situarse a medio camino entre la cruz y el esternón. Una línea perpendicular imaginaria que descendiera desde la cruz debería atravesar el codo y llegar al pie.
COMENTARIOS.- El omóplato ideal debe formar un ángulo de 45º con la columna vertebral y la posición ideal del húmero es a 90º del omóplato. Debiendo tener ambos huesos un tamaño similar, ellos forman prácticamente una “V” tumbada y con la punta dirigida al frente. Por lo tanto la corona del omóplato debe quedar encima de la punta inferior del húmero (codo), lo que produce que la punta del hombro (articulación escápulo-húmeral) quede a la mitad de la distancia entre la cruz y el codo. La estructura ideal del hombro debe coincidir con la profundidad torácica, esto es, el codo con la línea inferior del tórax y la corona del omóplato con la línea superior del tórax. Es importante observar bien la angulación escápulo-humeral, porque siendo escasa produce una cruz demasiado alta (lo que origina una caída a partir de este punto en la línea superior) y que la punta del codo no quede al nivel de las costillas, sino más baja, pudiendo parecer a primera observación que falte profundidad al pecho, cuando el defecto estaría en la angulación. Este defecto provocaría en el animal un paso corto. Si por el contrario la angulación fuese excesiva, daría como resultado un animal de cruz baja, lo que produciría una caída en la línea dorsal a partir de este punto y con grupa bastante mas alta que la cruz, causando una sobrecarga en la suspensión delantera, con movimientos defectuosos debido a la mala dirección de los músculos y una reducción de la propulsión al no poder agarrarse bien al suelo el tren trasero. En este tipo de angulación el codo sube por encima de la línea inferior.
DEFECTOS.- Cruz plana. Cruz alta. Hombro suelto (abrir los codos durante la marcha).

PIERNAS.- Paralelas, de osamenta poderosa. Metacarpos cortos, carpos fuertes y aparentes, levemente inclinados. La longitud de la pierna desde el suelo al codo debe ser el 50% de la distancia de la cruz al suelo.
COMENTARIOS.- La osamenta de un perro es virtualmente indicada por el hueso de las patas delanteras, lugar donde resulta más fácil examinarla. El observador prácticamente declarará fuerte o débil la osamenta del perro conforme sea grueso o fino el hueso de los antebrazos. Se exige que los carpos sean aparentes, esto es, que no se confundan con la pierna. El metacarpo, más fino, menos robusto, debe ser inclinado para facilitar un trote muelle y principalmente la oscilación vertical al paso tan característico del Fila. Si el metacarpo se aproximase a la vertical el movimiento sería rígido, duro.

PIES.- Dedos fuertes y bien arqueados, no muy juntos. Almohadillas plantares gruesas, anchas y profundas. La posición ideal del pie es apuntando al frente. Uñas fuertes y oscuras; las uñas blancas son admisibles cuando ese sea el color del dedo correspondiente.
COMENTARIOS.- El Fila tiene los pies más grandes de lo que podría esperarse contemplando sus patas o su masa corporal, este es uno de los detalles que influyen en su gran suavidad de movimiento. Los dedos estarán más o menos arqueados conforme más o menos profundas sean las almohadillas plantares. Estas almohadillas han de estar bien desarrolladas para absorber bien el impacto del pie contra el suelo y ellas marcan el arqueamiento de los dedos, que contribuyen también a esta misma función. Los pies divergentes evidentemente son una falta, aunque siempre que no sea muy acentuado no debe penalizarse, puesto que esta es una tendencia común en todos los molosos.

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